
Elegancia y atemporalidad.
J. lleva muchos años fuera por motivos laborales. Añoraba una vivienda en Galicia donde pasar sus vacaciones y disfrutar más tiempo de su familia y amigos. Con mucho gusto por lo estético y afín a las últimas tendencias en interiorismo, apostó por un laminado antihuellas negro combinado con un laminado en madera.
Diseñamos esta cocina con intención de integrarla, de manera natural, con la arquitectura del resto de la vivienda. Sus líneas sencillas y sus tonos logran mimetizarse en el ambiente del hogar. Se propone una línea de columnas con zona abierta para preparado de desayunos y una península de trabajo donde se apoya un mesado para comer, conversar y disfrutar de la cocina en compañía.
Los colores y la distribución hacen de esta cocina un lugar cálido y atemporal para compartir vivencias a lo largo de los años.